CARTA ABIERTA A LA INCERTIDUMBRE

Qué salida quedaría.
¿Es un segundo la vida? Un paso: izquierda derecha, derecha izquierda. Darse una oportunidad o tirar todo por la borda, si es que tenemos borda y qué tirar por ella. Y al final siempre tu rostro. Viento en popa. Infinito viento en popa. Luz al final del túnel: tu rostro.
¿La locura? Un tren que no es el nuestro, que sale en cinco minutos, que no tenemos equipaje, que va desde lo desconocido hacia lo soñado. O acaso nuestro tren, que sale a la hora acordada, con nuestro equipaje meditado para soportar las peores tempestades, que va desde lo conocido hacia lo real. ¿Dónde esta la locura? Es igual. Deambulo lejos de vos por este laberinto cruel, y sin darme cuenta vuelvo a casa siempre por el mismo camino porque aun no me asaltaron (nadie ni nada) por allí.
¿El amor? Acaso alcanzara este sacrificio para que te quedes conmigo para siempre. ¿Alcanzará ser el empleado del mes? ¿Alcanzará toda la materia pesada y oscura? O quedarme quieto, así, con mi magia, con mis sueños, con mis palabras: todo para vos. Qué es más/menos egoísta.
Siempre elegiré partir. Siempre quedarme contigo. Siempre desconoceré/desafiaré lo peligroso del NO. ¡NO! ¡NO! Respirar profundo, cerrar los ojos y: NO. Frío, evitable, estúpido NO. Que extremadamente grande, que extremadamente loco, que extremadamente idiota. Nada peor puede ocurrirle a un hombre que saber que le sucederá mañana. La incertidumbre es el motor de la vida. El NO es el motor de la incertidumbre. Y esto también pasará.
¿Y ahora? Si en realidad yo sí quería. ¡SÍ! ¡SÍ! Que extremadamente idiota. ¡Oh!, arrepentimiento, divina sensación de poder, de riendas sueltas de la vida: cerrá tus piernas/ojos porque NO. Pero tampoco pierdas las esperanzas: careta divina de la incertidumbre. Yo no pierdo las esperanzas porque en realidad sí quería… bajo los adoquines arena de playa.
Otra vez me perderé hacia ti por ti en ti. Y ya no habrá pasos en falso, porque en ti todo es en falso, todo es locura, felicidad, infierno, niñez, amor, madures, sueño de escapar que se cumple en cualquier aeropuerto. Infinito viento en popa. Luz al final del túnel. Careta divina. Arena de playa.
El placer está a la vuelta de cualquier esquina, debajo de cualquier piedra. Siempre una mujer hermosa o no tanto se dejará penetrar por mis poemas, mi pelo desordenado o mis no a la guerra. Yo la penetro. Ella se deja. Pueden faltar muchas cosas pero uno sabe quién es (un pobre diablo) y que quiere (no saber que es un pobre diablo). El placer a (muchas) veces no alcanza. Ella me penetra. Yo me dejo. A (muchas) veces no alcanza.
¿Quién soy? ¿Qué quiero? Lejos de ti esa respuesta puede estar muy cerca (demasiado). Soy un poeta. Quiero ser feliz. Feliz en el NO, y no en el sí y en la triste noche perfecta que el gordo Gómez tanto sueña. Laberinto cruel qué salida quedaría. Noches baile con la chica más linda para el gordo Gómez. Noches de incertidumbre y arrepentimiento por haber dicho que NO para el poeta.
Ojalá. Amén.