INCESANTE

Semen burbujeante, ávido, sin cobijo ni destino esta noche en tu piel. No hay distancias nuevas, pero es la hora del reposo y se calman las tempestades que incitaron la unión. El vigor ha concluido su tarea. El abrazo apenas contiene un nuevo sueño, una nueva mujer: siempre la misma, siempre otra ("nadie puede bañarse dos veces en el mismo río").
Oh! insensato padre de lo que no es. Inocente, inútil antídoto contra el veneno regulador tu soledad. Fuera de mí te veo morir. Dentro, en mi ser hijo de otro semen que supo aguardar su momento, que supo lograr su fin último, mi continuidad espera su oportunidad verdadera.
Otra noche de carne penetrada. Otra noche de alma resguardada.